The Walking Dead 4x16 - "A": Crítica de una season finale lamentable

¡¡ Ding, dong, ding!! Avisamos a los señores espectadores que el tren de los despropósitos ha llegado a la terminal. Por favor, recojan sus pertenencias y diríjanse al baño... tienen solo 7 meses para cagarse en la madre que pario a los de AMC.

Y si, se que este no es mi estilo pero, hoy, creo que he tocado fondo, y tras esperar que The Walking Dead volviera al buen camino (ese que nos mostro durante la primera midseason) y nos ofreciera un final de temporada en condiciones, lo que tenemos entre manos no es precisamente lo deseado tras acabar cada critica de los últimos ocho episodios cruzando los dedos.

Durante las últimas ocho semanas, hemos asistidos estupefactos a una mitad de temporada en la cual se sucedían capítulos sin sentido y que ofrecían la sensación de ser simplemente relleno, y hoy, pese a las buenas expectativas que nos dejo el capitulo anterior (con el grupo de Glenn llegando a la "Terminal" tras pasarlas canutas y con Daryl acompañando a un grupo que quería matar a Rick) nos encontramos con un capitulo que, sin ser aburrido, demuestra lo mal que se pueden llegar a hacer las cosas cuando no se tiene un rumbo establecido, y eso señores, es lo que pasa con esta serie, la cual, y a día de hoy, solo ha demostrado su buen hacer cuando se ha ceñido a la historia del cómic o se ha atrevido a explorar pequeñas y salvajes historias que nos retrotraían a este, algo que no encontramos en "A" (la letra pintada en un vagón de tren) pese a que lo han intentado.

Hershell vuelve a aparecer, por motivos de guión, aunque lo raro es que no lo hubiera hecho también el Gobernador

Repleto de flashbacks que intentan hacernos ver el cambio de actitud de Rick, este último capítulo de la cuarta temporada de "The Walking Dead" sitúa la acción un día antes de que Michonne, Carl y Rick lleguen a la esperada "Terminal", y tras ofrecernos algunos momentos en los que vemos que el hambre les está haciendo pasar malos ratos (normal si tenemos en cuenta que cazan conejos de peluche), asistimos al "violento" encuentro entre los nuevos y los viejos amigos de Daryl, un momento que si bien, prometía altas dosis de tensión, se resuelve de la manera más absurda que hemos visto en la serie, y aunque a algunos le molara ver a Rick darle un bocado en el cuello a un tipo, estos, también tendrán que reconocer que la forma en la que los protagonistas se libran de una muerte segura tiene más flecos sueltos de los deseables.

Y es que siendo sinceros, por mucho que te hayas endurecido, y por mucho que cuentes con el "factor adrenalina" por tener a un grupo de "animales" apuntándote a ti, a tu compañera, amenazando con violar a tu hijo, y dándole una paliza a tu amigo, eso no te convierte en un superhéroe ni a ellos en inútiles, algo que parece que si ocurre en el mundo de The Walking Dead, o al menos en este episodio en el cual, Rick esquiva balas a un centímetro de su cabeza y los malos, se ven incapaces de disparar aun cuando ven que un tipo le esta arrancando la garganta a bocados a su jefe.

Una situación que se resuelve de una forma nada creible y descartando la posibilidad de usar a estos tipos en algo interesante

Pero en fin... tomémoslo con filosofía, y veámoslo como una forma (cutre) de provocar el reencuentro entre Rick y Daryl que dará paso a la llegada a la Terminal, un sitio que, como se veía venir, no podía ser tan bueno como se auguraba, pero vayamos por partes.

Tras el encuentro con los bandidos, la recuperación de Daryl y otros flashbacks de la prisión, Rick y los suyos llegan al perímetro de "La Terminal" (Terminus) y tomando medidas (algo inteligente), esconden las nuevas armas que han conseguido y se disponen a entrar al recinto por la parte de atrás en un intento de que nadie los sorprenda, llegando a un lugar enorme, y en donde, aunque parece que hay poca gente, acaban encontrándose con lo que parece algún tipo de taller en el que hacen una toma de contacto con los habitantes de este lugar, los cuales, de manera exagerada (y sospechosa), se muestra contentos y amables por tener nuevos miembros para su comunidad.

Terminus tiene su propio patio para barbacoas, las cuales, parece que funcionan todo el día a pesar de que lo que vemos son muchas plantas y ninguna vaca / cabra / cerdo

Después de una inspección y dejar que nuestros amigos conserven sus armas, comienza una especie de tour por el patio en el que vemos a bastante más gente de la que se pudo observar la semana pasada con la llegada de Glenn, Maggie y compañía, y pese al intento de hospitalidad por parte de los habitantes del lugar, Rick observa que estos ocultan algo, quedando de manifiesto al ver que su "nuevo amigo" tiene en su bolsillo el reloj que Hershel le regalo a Glenn (bueno... Rick ve la cadena) y que el resto de habitantes exhiben ciertos objetos (el poncho de Daryl y el equipo antidisturbios de la prisión) que le son ciertamente familiares, poniendo de manifiesto que algo va mal, y haciendo que el grupo se ponga en alerta, algo que no le servirá de nada, ya que pese a la impresión inicial, "Terminus" cuenta con armas y personal suficiente como para poder controlarlos sin bajas y conducirlos, de forma absurda (viva el uso inútil de munición), hasta el lugar donde quieren retenerlos, y donde, tras un recorrido en el que vemos restos humanos, acabaremos asistiendo a un reencuentro (en el vagón marcado con la letra "A" que da título al episodio) entre el grupo de Glenn y el de Rick, quien, a modo de sentencia, y para acabar el capitulo, proclama : "Se han metido con la gente equivocada".

Evidentemente, este final será satisfactorio para muchos, pero para mí, y lo digo con todo el respeto del mundo, me ha parecido un despropósito en el que ni siquiera han acertado a realizar un cliffhanger en condiciones y en el que dejan pendientes tanto la trama de Beth (dios sabrá donde anda) como la de Tyrese, Carol y Judith, los cuales, y según vaya el presupuesto de la próxima temporada, podrán tener más momentos, y pasar a engrosar la lista de personas que los amigos de "la terminal" han acabado comiéndose en sus habituales barbacoas (ya hemos visto a la "pinche" cocinando en dos capítulos diferentes), las cuales, y para el que no lo sepa, son una extraña referencia a cierto arco que tiene lugar en los cómics poco después de la huida de la prisión, y que se centraba en cierto grupo de cazadores.

La unica escena de zombis del capitulo esta metida con calzador y nos presenta a alguien (ojala sea algun guionista) que no parece comprender que hay que huir (tenia todo ese hueco que ofrece la cámara) y no enfrentarse con palos a los zombis.

En definitiva, y creo que ya he dedicado demasiado tiempo de esta mañana a este despropósito, la AMC vuelve a lograr que los fans de The Walking Dead quedemos insatisfechos con el show, algo que, sorprendentemente, no evitara que el año que viene sigamos la serie con la misma expectación, algo que pese a vivirlo en primera persona (soy el primer culpable), cada vez entiendo menos.

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