La ironía hecha smartphone: tener más batería, jack de auriculares y ranura Micro SD es de gamas bajas
Estamos en 2018 y ya es casi normal que un móvil cueste 1.000 euros. Lo que no es normal para muchos de nosotros es que por ese dinero los fabricantes no nos ofrezcan más cosas, sino a menudo menos de las que teníamos (y queríamos) . Esos móviles de gama alta a menudo se olvidan de algunas de las demandas de los usuarios. Ni tenemos conector de 3,5 mm, ni tenemos baterías de gran capacidad, ni tenemos ranuras Micro SD. Todo eso ha quedado relegado a las gamas bajas y medias, como si fueran opciones no aptas para quienes pagan más. Qué ironía. Los grandes quitan, los pequeños ponen Samsung es una de las excepciones a esa regla. Tanto sus Galaxy S9/S9+ como sus recientes Galaxy Note 9 cuentan con conector de auriculares y con ranura Micro SD. En el Note 9 la cosa también mejora en batería y damos el salto a los 4.000 mAh, algo que parece sorprendentemente excepcional para un móvil que juguetea con esa etiqueta de precio de 1.000 euros. En otros casos nos encontramos con olvidos co...